El crecimiento del comercio electrónico en los últimos años ha disparado la demanda de espacio logístico. Pero el sector también se enfrenta a una disrupción sin precedentes motivada por factores como la rápida evolución de la tecnología, el crecimiento de la población de las ciudades y la creciente importancia de las cuestiones ambientales y de gobernanza. Esto obliga a las empresas a adaptarse rápidamente porque sus negocios están atados a las rigidez de las cadenas de suministro de las tiendas físicas convencionales. Como uno de los mayores inversores inmobiliarios de Europa, es fundamental que entendamos los retos a los que se enfrentan nuestros inquilinos.
Aberdeen llevó a cabo su segunda encuesta anual a principios de 2020, en asociación con Transport Intelligence. Gracias a este estudio exploramos las últimas tendencias del sector y obtuvimos información sobre cómo las empresas de logística están cambiando para satisfacer la creciente demanda de la industria y de los consumidores. La encuesta recibió 123 respuestas en 24 países. Los participantes pertenecen a una amplia gama de sectores, incluidos operadores logísticos, fabricantes, proveedores de comercio electrónico, minoristas y mensajeros. En el estudio participaron tanto propietarios que ocupan sus inmuebles como inquilinos.
Los resultados revelaron que, como se esperaba, la industria logística está experimentando un fuerte crecimiento. Alrededor del 77% de los encuestados dijeron que su actividad comercial había crecido de manera modesta o sustancial en 2019. Como resultado, los participantes del estudio declararon que se enfrentaban a una escasez cada vez mayor de la capacidad existente para atender más contratos. La disponibilidad de nuevos locales que permitan la expansión es también un problema creciente. Alrededor del 38% de los participantes dijeron que la falta de propiedades disponibles limitaba sus ambiciones comerciales. Estimamos que la tasa de vacantes en el mercado europeo de logística es inferior al 5%, en promedio. En muchas áreas, la única fuente de espacio de buena calidad es a través de promoción nueva.
El medio ambiene y la gobernanza también están impactando en la logística europea
Los cambios estructurales con respecto al medio ambiente y la gobernanza también están afectando a la infraestructura de la cadena de suministro a través de nuevas vías. La demanda está reestructurando los requisitos de las empresas de logística, al tiempo que se presta mayor atención al medio ambiente y al bienestar de los empleados. Alrededor del 76% de los encuestados confirmaron que sus empresas ya están emprendiendo iniciativas para reducir los efectos ambientales. Esto supone un aumento con respecto al 70% de la encuesta de 2018. Los inquilinos están exigiendo un mayor compromiso por parte de los propietarios en esta materia, especialmente en lo que respecta al suministro de fuentes de energía alternativas, como la iluminación LED, los paneles solares y los puntos de recarga eléctrica para automóviles.
Del mismo modo, la llamada «gig economy» o aquella basada en trabajos esporádicos y los acuerdos laborales de «cero horas» han encendido un debate sobre el bienestar de los empleados. Las actividades de un almacén pueden crear entornos peligrosos, lo que significa que los inquilinos se enfrentan a una legislación más estricta y a un mayor escrutinio de los medios de comunicación que otras empresas. Amazon, por ejemplo, ha sido criticada por los medios de comunicación británicos por supuestamente no reconocer los efectos de las condiciones de trabajo en el bienestar de los empleados. No es de extrañar, por tanto, que el 65% de nuestros encuestados dijera que sus empresas habían puesto en marcha iniciativas para mejorar las condiciones del personal. La escasez de mano de obra es significativa en el sector, en particular entre los camioneros, y es importante que las empresas se tomen en serio el bienestar de su plantilla si quieren seguir funcionando.
Mientras tanto, la digitalización ha reemplazado a las tecnologías físicas como el foco de la inversión empresarial. El paso a la analítica de datos, la inteligencia artificial, el blockchain y el «internet de las cosas» está impulsado por la creciente demanda de los clientes de una mayor rapidez y transparencia en la era de la entrega «instantánea». En cuanto a las necesidades de almacenamiento, el 80% de los encuestados dijeron que la tecnología automatizada se había vuelto cada vez más importante, ya que el trabajo manual es cada vez más caro y escaso. La encuesta de 2019 también muestra que, si bien la tecnología es el principal factor de disrupción de la industria, también es la solución. Hay un énfasis creciente en la robótica y en encontrar eficiencias en la cadena de suministro a través del análisis de datos y de la digitalización.
El sondeo también puso de manifiesto que la demanda de bienes inmobiliarios logísticos seguirá situándose en las áreas urbanas periféricas, dadas las agudas presiones del comercio electrónico. Es necesario que las empresas estén ubicadas cerca de los principales centros de población a fin de poder realizar entregas rápidas y tener acceso a grandes cantidades de personal de mensajería. Esto aumentará las presiones sobre los organismos reguladores para apoyar el equilibrio entre las infraestructuras económicas y el bienestar humano en las zonas urbanas. Si los operadores no piensan en el futuro, se les podría aplicar una normativa que los sitúe fuera de las zonas sensibles, a pesar de que éstas suelen ser la ubicación óptima para su infraestructura.
La última encuesta dejó claro que los operadores logísticos se encuentran bajo una intensa presión para que se adapten. Las cambiantes demandas de la globalización, la urbanización, los patrones de consumo y las limitaciones cada vez mayores de la legislación medioambiental y social requieren su atención. El desafío para los propietarios radica en que la naturaleza rígida de los bienes inmuebles forma parte del desajuste entre la necesidad de las cadenas de suministro de adaptarse y su incapacidad para hacerlo.
Para mitigar cualquier pérdida de ingresos, los propietarios deben colaborar con los inquilinos durante toda la duración de su contrato de arrendamiento para asegurarse de que las instalaciones cumplen con sus requisitos. Y los inquilinos necesitan identificar cualquier complicación que surja de los cambios en su modelo de negocio tan pronto como sea posible. En un mundo en el que los bienes inmuebles son cada vez más operativos y en el que los flujos de efectivo son menos seguros, los propietarios deben tratar a los inquilinos como socios para evitar que surjan riesgos a la baja.
Fuente: https://www.rankiapro.com