La propuesta de valor de la Costa para el comercio exterior integra puertos y complejos industriales
El Caribe colombiano, por excelencia, es un destino de expansión que las multinacionales e inversionistas usan como vía para abrirse a nuevos mercados. Estar más cerca de las principales economías del mundo es solo el ‘abrebocas’ de un diferencial que se apalanca en la existencia de zonas francas (ZF) o parques industriales como facilitadores de la logística de carga.
El Caribe colombiano, por excelencia, es un destino de expansión que las multinacionales e inversionistas usan como vía para abrirse a nuevos mercados. Estar más cerca de las principales economías del mundo es solo el ‘abrebocas’ de un diferencial que se apalanca en la existencia de zonas francas (ZF) o parques industriales como facilitadores de la logística de carga.
“Una de las principales diferencias de las ZF del Caribe respecto a las del resto del país es que tienen una ubicación privilegiada, de cara a su cercanía con los puertos más importantes como lo son los de Barranquilla, Cartagena y Santa Marta. Esta relación se constituye en un polo de atracción de la inversión extranjera, así como de la industria nacional que apuesta por el comercio internacional”, explica Silvana Insignares, PhD y profesora investigadora en Derecho Internacional de la Universidad del Norte. Clústeres logísticos
En
el pasado, los esfuerzos para mejorar el transporte de carga en la
región Caribe se enfocaban únicamente en la disminución de tiempos de
cargue y descargue de mercancías y, en términos generales, en la
búsqueda de nuevas eficiencias en las operaciones de este tipo.
Con
el paso de los años, la apertura a economías más grandes, la creación
de rutas desde y hacia los principales puertos del mundo y la
consecuente llegada de navieras internacionales fueron transformando las
dinámicas de las terminales portuarias, llevándolas a asumir labores de
otros eslabones de la cadena logística.
De ahí que hoy sea una
constante ver cómo en los puertos de ciudades por excelencia comerciales
(tales como Barranquilla, Cartagena o Santa Marta) no solo se realiza
el despacho de carga, sino que también se lleva cabo labores de
almacenamiento, control de inventarios, distribución e, incluso,
generación de valor.
Como lo explica Édgar Higuera Gómez, gerente
de Logística, Transporte e Infraestructura de la Andi, “en el mundo de
los negocios internacionales, vale la pena destacar que las ZF han sido
unos centros logísticos de producción, pero también de consolidación de
tráfico. En Colombia, les han dado un gran soporte a los terminales
marítimos”.
Por su parte, Leonardo Bautista, gerente de la Zona
Franca Palermo, precisa que las ZF ofrecen unas condiciones en materia
de renta, arancelaria y, sobre todo, unos beneficios particulares en
economía de escala que hace que las compañías que estén pensando en
invertir en la región tengan a su lado una ZF que les permita ser
competitivos en sus operaciones y financieramente viables.
Según
explica Ana María Badel, directora de ProBarranquilla, esta zona franca
se ha ido posicionando como el centro de las operaciones ‘offshore’ en
la Costa norte del país de manera complementaria con Palermo Sociedad
Portuaria, ofreciendo a empresas petroleras y sus proveedores soporte
mediante bases en tierra para las operaciones de abastecimiento de las
plataformas mar afuera.
En el mundo de los negocios internacionales, vale la pena destacar que las ZF han sido unos centros logísticos de producción, pero también de consolidación de tráfico
Desarrollo extraportuario
Coinciden los gerentes de los principales puertos del país en que los encadenamientos logísticos que promueven las zonas francas son una parte importante del desarrollo extraportuario y que, al mismo tiempo juegan un papel determinante en la competitividad regional y nacional.
Domingo Chinea, presidente de la Sociedad Portuaria de Santa Marta, cuenta que dentro de esta importante terminal “existen dos zonas francas con las que se trabaja en importación y exportación, sirven para estos dos tipos de operaciones porque aquí se recibe la materia prima y los complejos se encargan de hacerles maquila, también, aquí llegan vehículos y las zonas francas les han valor agregado con su alistamiento y entrega para la venta. Trabajar de la mano de ZF es un acierto de la cadena logística”.
De otro lado, Javier Díaz, presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex) señala que “tener la infraestructura portuaria adecuada y, además, aprovechar un mecanismo como las ZF o los Depósitos Aduaneros de Logística Internacional resulta fundamental para jugar un papel como lo está haciendo el Puerto de Cartagena en materia de redistribución de mercancías. Se está convirtiendo en un ‘hub’ regional que le permite a los buques bajar una carga y distribuirla en la zona donde tiene influencia, el Caribe”.
Fuente: https://www.eltiempo.com
Imagen: https://www.eltiempo.com