China está apostando por explotar la Ruta de la Seda, un camino de oriente a Europa, así como a las energías renovables. Aunque es considerada una de las potencias mundiales, el gigante asiático ve a México como un buen socio para acrecentar el intercambio comercial y tecnológico en toda la Franja y la Ruta.
Diego Ocampo, consultor en LGS International, comentó a NotiPress que China lleva más de 10 años invirtiendo en nueva tecnología y formatos de fabricación. De esa manera, ha logrado un menor desperdicio de materia prima y sobre todo seccionando sus grandes clústers a industrias con una exigencia de más alta calidad.
Realizar intercambios comerciales con China representa una ventaja para ambos lados. Por un lado, el gigante asiático pone el intercambio tecnológico, más mercados, pero sobre todo la promoción de sus industrias de alta gama. Mientras, México y otros países abren el abanico de posibilidades para suministrar a toda la población china de exportaciones de calidad.
Estos cambios han marcado algunas vertientes, pues la exportación de productos de baja calidad se han movido a países del sudeste asiático. Por su parte, países con capacidades productivas, como México, se abren al desarrollo y captación del nearshoring para algunas industrias.
La exportación de productos de origen chino continúa incrementando, lo cual se debe a que los precios de los productos han ido en aumento o la
materia prima también se ha encarecido. Lo anterior provoca que la balanza aumente en calidad y costo, siendo más evidente en cantidad, señaló
el experto.
Por otra parte, las exportaciones de México a China han incrementado, pero se debe trabajar más en los artículos de calidad y denominación de
origen. La empresa Mestizo, distribuidora especializada en mezcal, posicionó más de 30 marcas de licor en China, las cuales tienen una aceptación
en aumento en la población de entre 30 y 50 años.
México está viviendo una era muy importante, de la cual debe de tomar ventajas de los procesos de producción, logística, desaduanaje y riesgo
de importación desde China, sean exclusivos de industrias que no se puedan fabricar en territorio nacional. Se debe de explotar la capacidad de
producción para enviar más productos a China, pues la Franja y la Ruta, son oportunidades para realizar un buen intercambio comercial.
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